3.29.2016

A otra con esas.

Estoy cansado. Demasiado. Odio este bucle infernal del que parece que no tengo escapatoria. Ya no sé si soy yo, las circunstancias, el resto de personas... pero no entiendo el porqué de todo esto.

Hablo, nuevamente, del amor. O algo parecido.

Soy un chico demasiado fácil de ilusionar, que nada más conocerte ya se preocupa y sólo quiere lo mejor para ti. Pero, ¿por qué este sentimiento nunca es recíproco? Cada historia es diferente, cada persona que conozco un mundo nuevo que descubrir. Y piensas que, por fin, has encontrado a alguien que puede aportarte algo bueno, alguien de quien nutrirte, de quien aprender a diario. Alguien que por fin te de esa estabilidad que, de una manera u otra, llevas mucho tiempo buscando.

Pero no. Todo se acaba. Diferentes motivos pero un mismo final: cada uno por su lado, como si todo lo que hemos vivido jamás hubiera existido.

¿Dónde quedarán todas esas palabras, todos esos recuerdos? En la memoria de quien pueda retenerla. Y es que para cuando quieras buscarme, ya no existiré de la misma forma en la que tú y yo estábamos acostumbrados a ser.

Enterraré todos nuestros recuerdos, haciendo como tú.. olvidando todo lo que un día valoraste de mí. Me he cansado de escucharte, de que pretendas hacer como que yo también soy feliz. Lo siento, pero no.

A otra con esas.


No voy a esperar ni por ti ni por nadie

y, es verdad, sólo eres un cobarde.

Te voy a explicar todo lo que ya sabes

que todos me empiezan a cansar.



No hay comentarios:

Publicar un comentario