5.08.2023

Otra página en blanco.

Ufff… ya he perdido las formas. Ya no sé ni de qué iba esto. De desahogarme, supongo.

Y qué bonito es volver. Qué bonito es volver y recordar todas esas noches. Porque sí, siempre me ha gustado escribir de noche. Salir de noche. Vivir de noche.

Hoy vuelvo aquí, con ganas, con la cabeza bien alta. De saber que estoy muy orgulloso de cada paso en el camino. Que lo que siembras, siempre lo recoges. Quizás a veces menos florecido de lo esperado, pero sin querer quedarte con la duda de: ¿y si a la próxima florece más y mejor?

Pero ahora no es momento de quedarse con la duda. No es momento de volver, sino de avanzar. Hay que ser valiente, arriesgar e ir a por todas, hacer un All-In. Porque sí, amiga, hemos venido a jugar. Ahora es momento de recoger todos los frutos que hemos estado guardando con tanto cariño. Todos esos logros que has ido acumulando, con tu esfuerzo y dedicación. Todo eso que tanto anhelas y que con tanta delicadeza y perfección has sabido manejar.

Porque quién mejor que tú para hablar de perfección, mi querido virgo. Y es que, aunque sabes que lo perfecto no existe, no cesas en tu empeño de que siempre todo lo sea. Pero no, aprende de una vez a vivir con el error, a vivir sin miedo, y a quererte de una puta vez. Aprende a dejar de lado el sufrimiento y a valorar todo lo que tienes, empezando por ti. No es la primera vez que hablamos de esto, Alejandro… porque déjame recordarte que alguien escribió de ti una vez:

‘Quiérete, como los demás lo hacen contigo. Vales mucho. Y vuelve. Vuelve pronto. Siempre, siempre, siempre... con esa incansable sonrisa.’

Y eso quiero que hagas, que vuelvas. AllÁ donde eres feliz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario